martes, junio 19, 2007
Un sitio para no volver... NUNCA
9:27 a. m. |
Post de
Doña Col |
Editar entrada
Como ya os conté en la entrada anterior, el viernes tocaba concierto de Maná.
Así que como empezaba a las 22:30 en la Romareda, decidimos cenar por allí cerca y pese a que el sitio no me ha molado nunca mucho, se votó por la Cervecería D’Jorge en los Porches del Audiorama.
No me ha molado nunca mucho porque es el típico bareto de tapas recalentadas y típicos bocatas.
El caso es que se decidió ir allí a por un bocata para cenar rápido y poder entrar rápido a la Romareda.
Para empezar no me molo mucho ver que tardaban mucho en recoger las mesas y había montones de desperdicios sobre ellas.
El caso es que pillamos mesa, cogimos la carta y decidimos que tomar. Creo que no era nada complejo: dos bocatas de calamares y dos de Lomo al Roquefort… Bien… Llegamos a la barra a pedir y la primera en la frente: No hay ningún bocadillo de los de la carta, solo hay beicon y queso o jamón… ¿Cómo? ¿Eso es legal? Me parece a mi que no. Si no tienes alguno de los productos de la carta, tienes que sustituirlo por otro similar y avisar… aquí ni sustitución ni leches… Vieron que había gente (había gente si, pero no estaba el local lleno que conste) y pasaron de “perder el tiempo” preparando diferentes bocatas… Aun en el caso de que fuese verdad de que no les quedaba otro tipo de bocatas… ¿Cómo puede un bar quedarse sin ingredientes para bocadillos previendo que la afluencia de ese día sería mayor que el resto? (vamos, supongo que la del viernes sería similar a cualquier día de partido en la Romareda)… Además, algunos ingredientes, como los calamares, los tienen congelados, así que no pueden poner la excusa de que compran lo justo para que no les caduque…
Sustituimos los bocatas por unos de beicon con queso. Vaaaaaaaaaaaaale, bieeeeeeeeeeeeeeeen… Ahora a esperar que los saque para poder cenar… el primer cuarto de hora te mosqueas, a la media hora te cabreas, a los tres cuartos de hora estas que te subes por las paredes y a la hora haces lo que hice yo: pedir el libro de reclamaciones.
Pero ahí no acababa la cosa.
Me dirigí a una camarera y le solicité amablemente (lo juro, me costó mucho porque me salía una venaza impresionante de la frente, pero lo hice educadamente) el libro de reclamaciones. Me miró muy raro, como si no entendiese, le repetí la pregunta, esta vez diciéndole, “si hombre, las hojitas rosas de la DGA” y me dijo, “si un momento”… a los cinco minutos pensé “pues como este momento sea como el de preparar los bocadillos, vamos listos” todo esto eran cerca de las 22:20 y me dirigí de nuevo amablemente a la camarera. Le repetí mi solicitud y me dice la tipa “no te lo voy a dar, si lo quieres habla con el encargado” mis ojos como platos le dije “¿quien es el encargado?” y me dijo “está por ahí” será gili la pava… total que después de otear unos momentos, decidimos que el encargado era un individuo escondido en la cocina. Sergio se metió hasta el fondo y le hizo salir, así le volví a repetir mi solicitud “por favor, ¿me puede dar el libro de reclamaciones?” (Ahí ya me temblaba el parpado) Y me dice el gacho que no… ¿Cóoooomo? Entonces le dije, “¿Quiere que llame a la policía?” (no es chulería mía, todos los establecimientos que prestan algún servicio tienen obligación legal de tener su libro de reclamaciones a disposición de los consumidores y si no lo tienen, les cae multazo) y me dice el tio… “Me da igual, llámala” Y lo hice, el problema es que no me cogían en teléfono… ¿Dónde está la policía cuando hace falta? (luego comprobé que casi había más policía en el concierto que asistentes). El caso es que ya erán las 22:30 y el resto de gente (Sergio y mis cuñados) estaban bastante nerviosos porque era la hora de comienzo del concierto, así que nos fuimos…
¿Cómo puede haber sitios así?
¿Dónde ha quedado aquello del cliente siempre tiene la razón?
Menos mal que el concierto me arregló la noche ya que fue impresionante…
Así que como empezaba a las 22:30 en la Romareda, decidimos cenar por allí cerca y pese a que el sitio no me ha molado nunca mucho, se votó por la Cervecería D’Jorge en los Porches del Audiorama.
No me ha molado nunca mucho porque es el típico bareto de tapas recalentadas y típicos bocatas.
El caso es que se decidió ir allí a por un bocata para cenar rápido y poder entrar rápido a la Romareda.
Para empezar no me molo mucho ver que tardaban mucho en recoger las mesas y había montones de desperdicios sobre ellas.
El caso es que pillamos mesa, cogimos la carta y decidimos que tomar. Creo que no era nada complejo: dos bocatas de calamares y dos de Lomo al Roquefort… Bien… Llegamos a la barra a pedir y la primera en la frente: No hay ningún bocadillo de los de la carta, solo hay beicon y queso o jamón… ¿Cómo? ¿Eso es legal? Me parece a mi que no. Si no tienes alguno de los productos de la carta, tienes que sustituirlo por otro similar y avisar… aquí ni sustitución ni leches… Vieron que había gente (había gente si, pero no estaba el local lleno que conste) y pasaron de “perder el tiempo” preparando diferentes bocatas… Aun en el caso de que fuese verdad de que no les quedaba otro tipo de bocatas… ¿Cómo puede un bar quedarse sin ingredientes para bocadillos previendo que la afluencia de ese día sería mayor que el resto? (vamos, supongo que la del viernes sería similar a cualquier día de partido en la Romareda)… Además, algunos ingredientes, como los calamares, los tienen congelados, así que no pueden poner la excusa de que compran lo justo para que no les caduque…
Sustituimos los bocatas por unos de beicon con queso. Vaaaaaaaaaaaaale, bieeeeeeeeeeeeeeeen… Ahora a esperar que los saque para poder cenar… el primer cuarto de hora te mosqueas, a la media hora te cabreas, a los tres cuartos de hora estas que te subes por las paredes y a la hora haces lo que hice yo: pedir el libro de reclamaciones.
Pero ahí no acababa la cosa.
Me dirigí a una camarera y le solicité amablemente (lo juro, me costó mucho porque me salía una venaza impresionante de la frente, pero lo hice educadamente) el libro de reclamaciones. Me miró muy raro, como si no entendiese, le repetí la pregunta, esta vez diciéndole, “si hombre, las hojitas rosas de la DGA” y me dijo, “si un momento”… a los cinco minutos pensé “pues como este momento sea como el de preparar los bocadillos, vamos listos” todo esto eran cerca de las 22:20 y me dirigí de nuevo amablemente a la camarera. Le repetí mi solicitud y me dice la tipa “no te lo voy a dar, si lo quieres habla con el encargado” mis ojos como platos le dije “¿quien es el encargado?” y me dijo “está por ahí” será gili la pava… total que después de otear unos momentos, decidimos que el encargado era un individuo escondido en la cocina. Sergio se metió hasta el fondo y le hizo salir, así le volví a repetir mi solicitud “por favor, ¿me puede dar el libro de reclamaciones?” (Ahí ya me temblaba el parpado) Y me dice el gacho que no… ¿Cóoooomo? Entonces le dije, “¿Quiere que llame a la policía?” (no es chulería mía, todos los establecimientos que prestan algún servicio tienen obligación legal de tener su libro de reclamaciones a disposición de los consumidores y si no lo tienen, les cae multazo) y me dice el tio… “Me da igual, llámala” Y lo hice, el problema es que no me cogían en teléfono… ¿Dónde está la policía cuando hace falta? (luego comprobé que casi había más policía en el concierto que asistentes). El caso es que ya erán las 22:30 y el resto de gente (Sergio y mis cuñados) estaban bastante nerviosos porque era la hora de comienzo del concierto, así que nos fuimos…
¿Cómo puede haber sitios así?
¿Dónde ha quedado aquello del cliente siempre tiene la razón?
Menos mal que el concierto me arregló la noche ya que fue impresionante…
Pruba gráfica de que la noche acabó bien
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
La Gastro Red
Sobre mi...
A hacerse fans toca!!!
Archivo del blog
Amiguetes & Cia.
Blogs majetes
- Al amor de la lumbre
- Boca Dorada
- Carlos Valencia
- Cocina Tepindro
- Diario del Gourmet de Provincias y del Perro Gastrónomo
- Encantadisimo
- Gourmet de andar por casa
- I+D en mi cocina
- La cuina de casa
- Lucullian Delights
- Mi recetario
- Orogourmet
- Pisto y nopisto
- Recetas Caseras
- Se nos va la olla
- The Journal of a Girl who Loves To Cook
- Tiritinyam
5 comentarios:
Pues sí que comenzó bien la noche.
Oye, aclárame una cosa, esa foto ¿está tratada con Photoshop, o sois así de guapos?
No es por nada, pero... ¡que parejica más maja hacéis!
que noooooooooooooo...
que eso es amor de madre...
besicos gordos suegra... jejejeje
Que mala leche se me ha ido poniendo segun leia el tema!!!
En fin, gentuza hay en todas partes...
Lo dicho, si luego el concierto estuvo bien, fuera penas!!!!
Ya te digo... la mala leche la mía... jejeje... pero definitivamente me quedo con el concierto
Ains lo que hay que sufrir, a mi me pasa mucho al solicitar el ticket de caja que parece una chorrada pero no veas lo que cuesta a veces conseguir un NIF legible o que te echen un simple sello...
Publicar un comentario