Chafardeando en la cocina

Como veis, tenía planazo este fin de semana.

Ya van quedando pocos solteros en el grupo y en quince días, quedarán menos.

El plan era sencillo: disfraz, cena y juerguecilla (“Light”, que no estábamos para mucho trote)

El disfraz fue fácil: la novia no quería dar mucho el cante, de modo que le cayó algo discreto y sencillo a la par que elegante: un traje de charlestón, con plumas incluidas… estaba genial, aunque no cumplía uno de los requisitos de este tipo de disfraces que es hacer el ridículo. La doña estaba guapa… que le vamos a hacer… si la materia prima es de buena calidad, hay que ser muy zafio para estropear un plato ¿no?

Después de disfrazarla y colocarnos los accesorios a juego con la novia (collar de perlas de los chinorris y plumón de gallinácea en la cabeza) fuimos hasta a tomar unas cañitas para pasear bien a la novia y después a cenar.

El restaurante me ofrecí a buscarlo yo… Creo que estoy empezando a generarme una cierta fama de “tragaldabas” (en absoluto desmerecida) y nadie dijo ni mú… por lo visto se fiaban plenamente de mi… que cosas…

Así que decidí hacer una selección de 15 restaurantes en base a tipo de cocina, rango de precios y conocimiento personal… Llamé a todos y pedí ofertas, precios, y demás… Después hice un resumen al resto de la gente para que votaran… Al final se fiaron de mi recomendación y acabamos en “El festín de Babel” (En una de estas me hago organizadora de eventos… jejeje… eso deja pasta ¿no?)

La cena fue un lujazo… La comida deliciosa y el trato genial…

Cuando acabamos, nos encaminamos con paso firme y decidido al “Casco” (una de las zonas de marcha de Zaragoza)… Hacía mucho que no salíamos por ahí y nos dedicamos a vagar por los diversos garitos por los que nos movíamos antes… Aquello parecía una fiesta remember que hacen las discotecas… En todos los garitos ponían canciones de cuando aun éramos pipiolillas: Héroes del Silencio, Los Fresones Rebeldes, Ixo Rai… que recuerdos…

Nos lo pasamos genial y creo que conseguimos (al menos lo intentamos) que la novia disfrutase del ratico majo que le preparamos…

Como comprenderéis, este post no lleva fotos… no sea que alguien reconozca a alguien y la liemos… que en estas ocasiones se acaba desfasando un tanto y no es cuestión de que luego nos paren por la calle…